La clase dependiente del delito: De los márgenes al epicentro de la sociedad mundial pital es de estratos de clase (Torres, 2020c y 2020d). En las CDD hay primacía de la pertenencia a los estratos altos y superior, y por lo tanto al campo elitista, en tanto el devenir actor de los individuos se expresa primero en las corporaciones mencionadas. Dado que la CDD tiene una presencia ubicua en el conjunto de la pirámide social, es activadora de macro, meso y microdelitos. La escala del delito varía en función del volumen de ingresos percibidos por los individuos a partir de sus actividades delictivas. En términos esquemáticos, sostendré que los individuos de los estratos inferior y bajo de la CDD llevan adelante prácticas de microdelito, orientadas principalmente a la obtención de recursos para la supervivencia material, y que el estrato medio se orienta mayoritariamente al mesodelito, con el objetivo de alimentar una trayectoria de reproducción y de ascenso social. Junto a ello, el estrato alto despliega prácticas de megadelito, principalmente orientadas al enriquecimiento material para la acumulación de poder, y los pocos individuos que pueblan el estrato superior llevan adelante acciones de gigadelito con el propósito principal de incrementar la concentración de poder propio en las diferentes esperas sociales en las que se desenvuelven.
En cualquier caso, antes que recurrir a una sanción moral, en este apartado quiero llamar la atención sobre el impulso de integración social que genera la expansión de la CDD. Se trata de una integración social molecular generada a partir de dos vías. La primera, mediante la inclusión económica del estrato inferior y bajo de la CDD. la segunda, a partir de una menor reacción estatal y social a los delitos de los estratos alto y superior. La debilidad creciente de estos focos de reacción y de control se produce en el marco del mayor ocultamiento de algunos delitos y de una mayor visibilización de otros. Esto último sucede en la forma paradigmática del filtrado de información y de los escándalos público mediáticos. Así como es evidente el efecto de integración económica que producen las organizaciones criminales al momento de generar empleo en el estrato inferior, no sucede lo mismo con el proceso de ocultamiento social de las prácticas delictivas de los estratos alto y superior. Estas últimas traen consigo la invisibilización de los macroefectos sociales que acompañan tales movimientos. es precisamente producto de esa invisibilización social que se hace posible sostener el actual orden social, profundamente injusto, y sus respectivos mecanismos de integración. La expansión de la CDD combina entonces el incremento Para una conceptualización más avanzada de la forma actual de estratificación de las esferas nacionales de la sociedad mundial, y de los campos de élite y popular, ver Torres (2020c, 2020d. 233